Hails jah Haila.
ᚺᚨᛁᛚᛊ ᛃᚨᚺ ᚺᚨᛁᛚᚨ.
𐌷𐌰𐌹𐌻𐍃 𐌾𐌰𐌷 𐌷𐌰𐌹𐌻𐌰.
Haila Frijonds jah Frijonjos Meina!
ᚺᚨᛁᛚᚨ ᚠᚱᛁᛃᛟᚾᛞᛊ ᛃᚨᚺ ᚠᚱᛁᛃᛟᚾᛃᛟᛊ ᛗᛖᛁᚾᚨ!.
𐌷𐌰𐌹𐌻𐍃 𐍆𐍂𐌹𐌾𐍉𐌽𐌳𐍃 𐌾𐌰𐌷 𐍆𐍂𐌹𐌾𐍉𐌽𐌹𐍉𐍃 𐌼𐌴𐌹𐌽𐌰.
“Esforcémonos puliendo las estrellas que brillarán mañana”.
Los niños son como esponjas, absorben información y comportamientos, aún así, aprenden por repetición. Es importante mantener la serenidad al explicar cualquier tema y responder a sus preguntas de la manera más clara y honesta posible.
Los pequeños en casa nos observan todo el tiempo, incluso cuando pensamos que no lo hacen o que no comprenden lo que está sucediendo a su alrededor.
Es nuestro deber instruirlos con lo mejor que tenemos y, por supuesto, enseñarles las 9 nobles virtudes como un brújula moral que vale la pena practicar en el día a día. Sin embargo, aquí es importante recordar que mientras son pequeños, los niños serán un reflejo de lo que ven y escuchan en casa, por lo que debemos cuidarnos del “doble discurso” (decir una cosa pero hacer lo contrario).
Tan solo como dato, hay que tener en cuenta que el lenguaje toma forma en la mente a partir de los tres años, así como las nociones más generales del funcionamiento de Midgard, por lo que hay que prestar especial atención a nuestra forma de hablar y hacer las cosas frente a ellos.
Esta guía consta de tres partes, de acuerdo a las distintas etapas de desarrollo. Es importante aprender a guiar a los más jóvenes del hogar conforme a su edad. Ya que no podemos relacionarnos de la misma manera con un niño de preescolar que con un adolescente, pero siempre hemos de actuar con amor y paciencia.
Guía para padres, etapa 1: de 0 a 6 años.
Nos encontramos en la etapa más tierna de la niñez. Aquí la creatividad es la mejor aliada. Compartir la tradición con los más pequeños será incluso una tarea divertida.
Aquí algunas ideas para los más pequeños:
- Canciones y sonidos.
Las canciones son un buen medio para el aprendizaje, una tonada y letra pegajosas son nuestros aliados. No se necesita una gran producción para ello. Esta opción funciona gracias a la repetición. Puedes componer una canción sencilla sobre algún elemento de la Tradición o utilizar alguna percusión, lo cual ayudará mucho a involucrar al infante con el ritmo.
Ojo, no importa cuántas veces el pequeño te pregunté algo, él no sabe (ni le interesa) si estás cansado o apático, siempre responde con amor y paciencia porque esta es una etapa en la que preguntarán por todo.
Habrá días en los que no estaremos de buen humor y puede que los niños nos pongan un poco de nervios, pero debemos ser neutrales, a fin de cuentas es parte natural de la existencia y pasa como todo.
- Cuentos para antes de dormir
Los cuentos para antes de dormir también son importantes, refuerzan vínculos, en ellos se invierte tiempo de calidad, el pequeño en casa desarrolla mejor la seguridad y, además, recordamos mejor lo último que aprendemos antes de dormir.
La importancia de los cuentos en la infancia es grande, que mejor si se usan para instruir al niño en este bello camino.
Al final de cada historia, se debe dar un momento al infante para que haga algunas preguntas, siempre las habrá.
Debemos responder de manera que nuestras palabras no suenen enredadas, de manera clara y honesta. No siempre sabremos las respuestas a todas las preguntas y es bueno aceptarlo, de hecho da la oportunidad a qué descubran la respuesta juntos. Esta es la mejor parte de la enseñanza, no la desaprovechen.
- Participación
A los niños siempre les dará curiosidad lo que pasa a su alrededor. Habrá situaciones en las que se aventuraran a descubrir su entorno. En este caso pondremos como ejemplo el altar en casa, sabemos que algunos elementos son peligrosos de manipular, pero todo con el debido cuidado saldrá bien.
Preguntarán para que sirve esto, para que es aquello y debemos responder a ello (es nuestra obligación, después de todo). A la hora del bloth, podemos permitirles participar, darles pequeñas tareas según sus capacidades, ya sea ayudar a encender las velas, poner las ofrendas o servir la bebida, siempre observándolos para que no ocurran accidentes . Y a la hora de brindar, hay que dejarlos que brinden con nosotros (con jugo de uva o arándanos, por supuesto), pues la idea es que se sientan parte de la celebración. Esto les da sentido de pertenencia “yo pertenezco aquí” “soy parte de esto”.
Parecerá poco para algunas personas , pero esto tiene mucho peso emocional y es determinante para muchas cosas en el futuro del pequeño.
Situaciones tensas…
No todo es dulce cuando se trata de niños, a veces, muchas veces tendrán momentos de estrés o enojo. Los niños aún no saben cómo gestionar sus emociones, cómo dejarlas salir, y por ende, explotarán más de una vez.
¿ Qué podemos hacer nosotros como adultos? Mantener la calma. Hablar con un tono firme más no gritando, no hacer amenazas “si no te callas, el señor Krampus te va a llevar “ “si no te comportas, la señora tal te va a pegar” o también el típico “verás con tu papá”. Estás frases provocan varias cosas en la mente del pequeño, nosotros mismos nos quitamos la autoridad para corregirlo y la cedemos a alguien más, nos restamos confianza.
Pensemos ¿en quien podría confiar nuestro hijo si nosotros permitimos que alguien más los dañe? claramente no lo permitiríamos pero nuestras palabras dicen lo contrario, y la última frase pone como enemigo al padre; lo último que queremos es que nuestros hijos nos vean con miedo. Recordemos que somos el principal embajador de nuestra Tradición.
Muchas de las veces tomarlos en brazos mientras lloran será la mejor opción, no es consentirlos, es hacerles saber que estás ahí para ellos. El llanto no durará mucho, cuando estén tranquilos, es el momento de hablar. Tratemos de estar tranquilos y no hacerles segunda a su rabieta, tomar las cosas con calma y explicar la situación sin alterarnos. Un ejemplo de ello sería cuando se emociona con un juguete que de momento no podemos llevar, desde un inicio podemos explicar el por qué no podemos comprarlo en ese momento, probablemente habrá llanto después de eso pero debemos mantenernos firmes y calmados, volver a repetir el por qué no puede tener el juguete en ese momento. Respetemos el poder que encierran las palabras, pues esto es básico en nuestra Tradición y aún más siendo Odinistas.
Con el tiempo la situación dejara de ser tan tormentosa para ambas partes, recordemos que la repetición es una aliada, en algún momento el pequeño entenderá la situación y la próxima vez que se presente ya no actuará del mismo modo. Debemos ser firmes hasta el final pero sin ser duros.
Guía para padres etapa 2: de 7 a 12 años.
Esta etapa no suele ser tan conflictiva, nuestro deber de instruirlos será un poco más sencillo ahora que pueden leer por si mismos. Las herramientas de la etapa anterior seguirán siendo útiles, pero a esto sumaremos la observación.
Esta es la etapa en la que inician su vida escolar, comienzan a relacionarse con más niños y a conocer de otros estilos de vida y otras creencias. Es aquí lo que debemos observar, nuestros niños podrían ser víctimas de comentarios muy mal intencionados emitidos incluso por adultos (porque así es Latam). Como padres lo mejor que podemos hacer es hacerlos sentir orgullosos de quienes son, de su familia y de nuestros dioses, y de paso, tomar cartas en el asunto ante la dirección de la escuela o el adulto responsable.
Siendo adultos hemos sido blanco para burlas y demás por el camino que seguimos, los pequeños no serán la excepción. Aprender a defenderse sin llegar al nivel de quienes nos agreden será un factor determinante para la salud espiritual del pequeño incluso en futuras etapas.
Es importante recordarles las nueve nobles virtudes, mostrarles como usarlas día con día, por ejemplo con el honor, recordarles que tener honor es defender sus creencias, su tribu/familia y a ellos mismos. Si bien no somos personas que busquen problemas, somos nosotros quienes debemos parar en seco a quienes nos agreden. Si nuestro pequeño recibe burlas, es mejor que no responda igual que su agresor, no siempre es fácil hablar con personas que le temen a lo diferente y, hablando de niños, esto no lo hace menos complicado, si decide responder que lo haga sin atacar “merezco respeto, así como tú lo mereces” .
Estás pequeñas escenas en ocasiones suben de tono, si el pequeño ya trato de hablar con su agresor y este continúa o incluso decide llevar más lejos la situación, es hora de que los adultos hablen.
RECUERDEN
Las escuelas deben ser laicas.
Guarden la compostura , sobre todo si los niños están presentes, estas situaciones las aprenderán con el ejemplo de cómo lidiamos con el problema.
No olviden que los niños son reflejos de lo que ven y escuchan en casa, y en situaciones de tensión ideológica, ya no hablamos con el niño sino con los padres.
Procuremos evitar hacer más grandes los problemas, pero si no sueltan a los nuestros, se llega la hora de intervenir y en estas cosas no pueden vernos flaquear o actuar con indecisión.
Hay personas con las que es difícil hablar civilizadamente, es mejor mantener lejos a estas personas.
Guía para padres etapa 3: Adolescencia.
Esta etapa es la más difícil, lidiar con adolescentes hará parecer que todo nuestro trabajo ha sido en vano en muchas ocasiones, pero esto no es así.
La rebeldía en los jóvenes estará presente por mucho tiempo, más de alguno estará en el proceso de decidir si seguir en el camino o no, y esto es muy válido.
No debemos bajar la guardia, busquemos siempre el momento de acercarlos a los dioses, sin hostigar ni imponer como a muchos nos impusieron ya saben qué.
Recordemos como fue está etapa en nuestra vida (que en algunos casos fue traumático) y seamos empáticos. Démosle a nuestro pequeño (ahora no tan pequeño), la privacidad que muchos no tuvimos en esa etapa. Es aquí donde no solo les hemos de demostrar amor, sino también confianza. Fortalecer los lazos de confianza en familia justo en esta etapa tan caótica es lo que más se ha de necesitar.
Como padres siempre nos vamos a preocupar por ellos, pero soltarlos un poco los hará sentir confianza. Podría ser ya momento de que ellos aprendan ha dar inicio a los rituales, mantenerlos interesados en seguir aprendiendo, en seguir descubriendo lo que los dioses hablan mientras se descubren a si mismos y al mundo en el que estamos.
Ojo, la confianza no está peleada con las reglas, si hemos de soltar, pero solo un poco, es decir, cuidar de sus horarios, conocer sus amistades, involucrarse en sus intereses, estar al tanto de su día a día sin llegar a hacerlos sentir que están siendo vigilados.
Esta etapa es difícil tanto para ellos como para nosotros, los entendemos y sabemos cómo es que se sienten ¡porque ya pasamos por eso!. Algunos dirán que disfrutaron está etapa, otro tantos recordarán que no, si este es su caso es momento de que seas el adulto que deseaste tener a tu lado.
Habrá momentos en los que sentiremos que se alejan, pero debemos persistir y ser pacientes. Si tratamos de meterlos en una caja estaremos provocando justo lo contrario al efecto que buscamos. Ellos merecen independiecia, pero deben saber cómo funcionan las cosas en Midgard.
Mantener viva la tradición en sus corazones no es tarea fácil, no son lecciones cortas, son una vida entera. Somos consientes de lo poco que sabemos y buscamos aprender más. Motivemos a nuestros hijos a buscar más, a no soltar de las manos a nuestros dioses. No caigamos en desilusión, mantengamos la tribu unida, seamos lugar seguro para nuestros hijos y acerquemos sus corazones a los dioses. No es fácil, pero la dicha de verlos aprender y acercarse cada vez más será mucha.
En el culto a los dioses, los ancestros y la familia se encuentra la verdadera fuerza de este camino. Involucrarse todos en ello nos hace fuertes y nos une.
Los dioses siempre tienen la respuesta, prestemos atención para escucharla y acerquemos a nuestros más queridos al calor del Fuego Sagrado.
Andrea Díaz
ᚨᚾᛞᚱᛖᚨ ᛞᛁᚨᛊ
H.O.S.F.
ᚺ.ᛟ.ᛊ.ᚠ.
México.
ᛗᛖᚲᛊᛁᚲᛟ.